
Con globos, cintas de colores, silbatos, carteles y la algarabía propia de una fiesta, 51 estudiantes politécnicos de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanísticas, FCSH, dieron la bienvenida a sus “padrinos” de la tercera edad el miércoles 21 de mayo.
En el acto se inauguró el proyecto Formación Activa para el Adulto Mayor, FAAM, organizado por el Centro de Desarrollo Social Aplicado, CEDESA, de la FCSH, que tiene como objetivo convertir a 60 adultos mayores en actores estratégicos para la promoción de la historia, cultura, conocimiento tradicional e historias locales.
Carlos Luis Murillo, uno de los participantes, se enteró del programa por su esposa, quien escuchó el anuncio en su parroquia y lo animó a inscribirse.
En el FAAM, 60 adultos mayores –que ya empezaron clases este lunes 26- aprenderán el manejo de las herramientas básicas de computación y cómo desarrollar ideas para crear negocios. A su vez, a través de la asignatura Etnia y Folclore compartirán con los estudiantes costumbres y saberes ancestrales.
Cada participante cuenta con su “ahijado”, que lo ayudará como tutor de clase y como guía en el campus Prosperina. Diez estudiantes de la ESPOL serán los facilitadores de las diferentes asignaturas, según explica Loretta Moreira, directora de CEDESA.
Moreira, también coordinadora académica del proyecto, indicó que con la materia de Microemprendimiento se espera desarrollar buenas ideas de negocios y que se espera reciban el apoyo del Ministerio de Inclusión Social.
El FAAM comprende un semestre de estudios con dos parciales. En el primero recibirán herramientas de colaboración digital, etnia y folclore; en el segundo, finanzas personales y Microemprendimiento.
Según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, en el Ecuador el 6.5% de la población corresponde a personas de la tercera edad. De ese porcentaje, el 47% se encuentra activo como subempleado. Esta última cifra obtenida del Observatorio Económico Social, indicó Alicia Guerrero -docente de la FCSH y gestora del proyecto-, permitió determinar que existe una oportunidad para tomar esos saberes y conocimientos ancestrales con el fin de transformarlos en microemprendimientos.
El evento inaugural culminó con la entrega de un presente, elaborado manualmente por los ahijados a sus padrinos. Los pasacalles interpretados por el Caballero del Pasillo, Néstor Tomalá, evocó recuerdos de antaño y generó aplausos entre el público.
Los adultos mayores expresaron su gratitud a la ESPOL por “tomarlos en cuenta” y hacerlos sentir útiles en la sociedad.